¿Dónde estoy? ¿Qué lugar es este? ¿Por que
no veo nada? ¿Por qué no puedo abrir los ojos? Los siento pesados, como si algo
no me dejara abrirlos…quizás mis deseos…si, no quiero abrirlos. No escucho
nada, todo esta en completo silencio, todo esta en completa oscuridad, ¿Acaso
me encuentro en la nada? Pero si me encontrase en la nada yo no estaría allí o
¿es que yo soy nada?...Si, hace tiempo había pensado eso mismo.
-Tomoe –Escuche en un leve susurro.
-¿Quién me llama?
-Tomoe- Escuche nuevamente pero esta vez
mas lejano.
-Que hermosa voz, pero ¿Quién me llama?
¿Acaso es la muerte que me guía a ella? ¿Es acaso que me encuentro muerta ya?
¿Lo habré logrado al fin? Lo ultimo que recuerdo… ¿Qué es lo ultimo que
recuerdo?...Es verdad, lo ultimo que recuerdo es que me encontraba en mi
habitación, oscura, sombría, o quizá es que así la sentía por que así se
encontraba mi alma. Ya me había hartado de todo [A decir verdad desde hacia
mucho tiempo ya me había hartado de todo] fue entonces que decidí actuar; fue
como si la propia vida me dijera que era tiempo de que lo hiciera, que ya era
tiempo de que todo terminara; al volverme hacia un lado allí se encontraba
aquella brillante navaja doble filo, casi parecía gritármelo. La tome sin
pensarlo y le observe entre la vidriosa mirada que producían mis lagrimas
intentando ser estancadas. Voltee hacia mi muñeca izquierda y un par de
lagrimas cayeron al piso dejando un brillo que tal que ni siquiera parecía ser
creado por lagrimas. El filo se hundió en mi muñeca como si de un cuchillo
sobre mantequilla se hablase; no hubo dolor [Al menos no físico] la sangre comenzó
a emanar en cuando la navaja perforo la piel siendo cada vez mas abundante a
medida que el filo se adentraba. Una vez adentrada hasta la mitad saque la
navaja dejando que un par de gotas cayesen al suelo mientras su brillante
brillo se descubría del líquido escarlata. La cambie de mano, domándole esta
vez con la mano izquierda, hundiendo el filo en mi muñeca izquierda, nuevamente
el filo se hundió hasta la mitad para luego salir bañada en el liquido vital
del cual se deshacía con facilidad, eso realmente me hizo sonreír y le tire a
un lado, lentamente sentí como mi cuerpo se fue debilitando mientras el liquido
carmesí teñía el suelo a mi alrededor. Después de eso no recuerdo nada más,
todo se había puesto negro y de allí simplemente <> aquí,
pero ¿Qué era este lugar? ¿A caso pasaría por lo mismo que Dante? ¿Recorrería
los 7 infiernos en busca de mi liberación? No, no lo creo, por que yo no poseo
siquiera el deseo de salvar mi alma, ya se encontraba perdida en vida, que más
da que esté pérdida en muerte.
-Tomoe –Volvió a escucharse la misma voz,
lo que me hizo abrir lentamente los ojos, mostrando figuras borrosas. Una vez
logre enfocar dichas imágenes me tope con la dulce imagen de una chica de piel
morena clara, unos grandes y preciosos ojos violetas tan expresivos, tan
llamativos, y su largo cabello marrón ondulado que caía suelto hasta sus caderas. Toda ella era una obra de arte, era
preciosa, era una belleza impresionante; pero si su belleza me causo impresión
lo siguiente que vi lo hizo aun más. De su espalda se alzaban un par de
hermosas y enormes alas blancas, de un blanco brillante y puro blanco, tan puro
como la dulce sonrisa que esbozaba – Ya haz despertado – Dijo sonriendo.
-¿Despertado? – Pregunte sin prestar mucha
atención, ya había despertado hace unos momentos, solo que no quería abrir mis
ojos - ¿Dónde estoy? – Pregunte incorporándome.
-En el infierno –Contesto con ligera
tristeza en sus palabras.
-Claro…-Era de suponerse que estaría allí,
luego de haberme quitado la vida – Así que finalmente lo logre – Pronuncie para
mi misma.
-En parte -
Contesto sin tomar en cuenta que había sido un comentario propio.
-¿A que te refieres?
-No esta todo perdido aun, no es tiempo de
que te encuentres aquí.
-Si no fuese tiempo no estaría aquí.
-Digamos que es algo momentáneo, pero
puedes regresar, por eso me encuentro aquí.
-¿Para que querría regresar? Por algo lo
hice, luego de tanto tiempo y tantos intentos al fin lo logré, por que querría
desperdiciar la oportunidad de deshacerme de todo.
-¿Incluso si te deshaces de todos?
-¿Qué quieres decir?
-Haz olvidado a todos aquellos que te
rodean y te quieren.
-No los he olvidado, pero no creo que sea
algo que les llegue mucho, y se les llegase a dolor en poco tiempo les pasara.
-¿Realmente crees tal cosa?
-Desde luego, nunca fui alguien importante
en la existencia.
-¿Qué te hace pensar tal cosa?
-No se necesita ser un genio para saberlo,
solamente observar mi vida, cada cosa que ocurrió, cada decepción, cada ideal
frustrado y camino truncado, destruido.
-¿Y si eras de tan poca importancia por que
jamás habías logrado tu objetivo de morir?
-Bueno, quizá ni la propia muerte me
quería.
-¿No crees que eso es una mala excusa?
-Es lo más coherente.
-Lo más coherente y lo cierto es que aun
hay muchas almas que rezan por ti, por tu existencia y que aun no haz terminado
con tu misión.
-Mi misión, y ¿Cuál se supone que es mi
misión? ¿Seguir soportando la escoria de vida que he llevado? No gracias, nadie
me pregunto si la aceptaba o no.
-Este tipo de misiones no puedes decir si
las aceptas o no, son el precio por estar vivo.
-¿Pues adivina que? No la acepto por que no
quiero estar viva.
-No puedes decidir si quieres estar viva o
no.
-¿Entonces que es lo que puedo decidir? ¿Si
quiero estar al lado de dios o de Satán? ¿Eso es lo único que podría decidir?
¿A eso le llaman libre albedrío? Pues yo no pienso limitarme a ello y sabes
algo no quiero seguir con vida, prefiero estar muerta en el infierno que será
un infierno menos lastimoso que el terrenal.
-Quizá sea un infierno menos lastimoso en
parte para ti, pero ¿Qué hay del infierno que crearas para los que te rodearon?
-No creo que les importe demasiado.
-Les importara lo suficiente como para
sufrir si no estas allí y todos aquellos esfuerzos que alguna vez hiciste para
hacerles sonreír los perderán hoy que ven que haz intentado destrozar tu vida.
Verán tus esfuerzos como hipócritas, como vanos, intentando salvar sus vidas y
darles sentidos cuando tu destrozabas la tuya – Sus palabras habían me habían
<> realmente y creo que eso lo noto en rostro.
-…Yo solo luchaba por vidas que valieran la
pena conservar.
-¿Y que te hace pensar que la tuya no vale
la pena?
-¿Qué no es obvio? Es una bazofia
-¿Y las personas que la aprecian?...Que
aprecian tu existencia y que les hace feliz el estar contigo.
-Lo superaran pronto.
-No creo que sea así – Ambas guardamos
silencio por varios minutos; un silencio
largo que parecía eterno y a la vez como si solo fuese un suspiro.
-Contéstame algo.
-¿Si?
-¿Por qué lo haces?
-¿Por qué hago que?
-¿Por qué haces esto? ¿Por qué te molestas
en ello? Si es tu misión, si es que te han mandado a hacerlos simplemente diles
que yo no quise hacer caso, que no me intereso, ellos sabrán que no tuviste la
culpa, no creo que te castiguen.
-Por lo único que me castigarían es por
venir a un lugar como este sin que me fuese ordenado – respondió con una
cordial sonrisa haciéndome sorprender.
-¿A que te refieres? ¿Estas aquí sin
autorización? – Pregunte, a lo que ella simplemente asintió con la misma
sonrisa – Pero ¿Por qué lo hiciste? Eso podría costarte incluso tus alas ¿Por
qué haces tal cosa? Tal tontería.
-Por que a mi no me parece una tontería el
salvar tu alma.
-Pero en ningún momento mi alma te ha sido
encomendada.
-El salvar tu alma no es mi trabajo es mi
placer.
-Es una estupidez, arriesgas demasiado por
solo una humana.
-El punto aquí es que no eres solo una
humana.
-¿Por qué te aferras tanto? Es absurdo.
-Si es para ti absurdo el aprecio que
alguien puede tener por ti para arriesgar todo con tal de poder salvar tu vida
y tu alma, está bien es absurdo.
-Pero es que tú eres un ángel.
- Y ¿es acaso que por ser un ángel no
podría quererte?
-Pero ¿Por que lo arriesgas? No tiene
sentido.
-Dicen que el querer a alguien no necesita
sentido – menciono sonriente logrando que lagrimas brotasen de mis ojos sin
poder retenerles – Ahora imagina lo que sentirán aquellos que te aprecian,
aquellos que aprecias y por los que haz luchado sin descanso por hacer sonreír.
Todas aquellas sonrisas que con esfuerzo lograste que esbozaran las convertirás
en lagrimas por hacer esto.
-Yo...no…no quiero…no quiero sea así – dije
sin parar de llorar.
-Entonces déjame regresarte una vez más.
-Pero…Si regreso, ¿Qué sucederá contigo?
¿Te reprocharan lo hecho?
-Si lo llegasen a hacer no importaría pues
realmente habría valido la pena – contesto con su dulce y cariñosa sonrisa de
siempre.
-¿Te volveré a ver? – Pregunte esperanzada.
-Cada día.
-¿Lo prometes? – pregunte con una mirada
casi suplicante.
-Es una promesa como cuando tú prometiste
hacerles sonreír – Contesto con una a amplia sonrisa que me hizo sonreír a mí
también.
-Entonces…quiero volver –Conteste
simplemente mientras me abraza cubriéndome con sus alas, podía sentir su
calor…luego de eso solo recuerdo haber despertado en un cuarto lleno de luces,
todo era algo confuso, las imágenes eran borrosas, había muchas voces hablando
entre sollozos. Una vez las imágenes se aclararon pude distinguir a varias
personas a mi alrededor, seres queridos que en alguna ocasión había hecho sonreír
y ahora se encontraban allí, llorando por no saber si me quedaría con ellos o
me iría por siempre; sus rostros reflejaban alivio, alegría de volver a verme
despierta. Voltee hacia los lados en busca de aquel hermoso ángel…Allí estaba
ella sonriendo dulcemente, lo que me hizo sonreír entre lagrimas y susurrar
ligeramente – Gracias.
-Tomoe – Escuche nuevamente esa voz, abrí
los ojos, era la voz del ángel que se desvanecía poco a poco – Tomoe, despierta
– Fue lo ultimo que dijo antes de que abriera los ojos despertando en una habitación
muy común para mi.
-Neechan – Escuche esa misma voz del ángel
que me hizo voltear hacia la dirección de donde venia – Némesis me esta
molestando – Decía con un dulce tono mientras hacia un tierno berrinche que me
hizo sonreír y levantarme.
-No es verdad – Decía el chico que
continuaba jugando con ella.
-Némesis, ya te dije que dejaras tranquila
a mi osito – Mencione golpeándole en la cabeza con una carpeta que se
encontraba cerca para después abrazar a mi preciosa hermana y besarle la
mejilla…Creí haber conocido un ángel que había salvado mi vida, que me había
dado una nueva oportunidad y me había traído la felicidad, creí haber conocido
a un ángel que me había alejado de la soledad y que con su dulce sonrisa me
había hecho sonreír…Creí que había conocido a ese ángel pero me di cuenta de
que ese ángel no era solamente un sueño o ilusión, ese ángel que me salvo
fuiste tu…Ese ángel siempre serás tu, mi osito.
Tema: A Angel Story 
Sáb Oct 15, 2011 9:42 pm
me encantó de verdad =)
¡Moola mucho! ^^
